Imagen: Stéphane Séjourné
Principales retos de Séjourné
Cuando el que ha sido hasta ahora ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, asuma su cargo en la Comisión Europea para liderar la estrategia industrial de la UE, tendrá que luchar para mantener la influencia de Francia en el bloque.
El lunes se hizo público que Séjourne sería el nuevo candidato de Francia para la Comisión, después de que su primera opción, Thierry Breton, el comisario de Mercado Interior, se viera forzado a dimitir. Esta dimisión ha suscitado la preocupación del país galo, pues consideraban a Breton un contrapeso clave a la influencia alemana en el corazón de la UE, con capacidad para preservar el equilibrio entre las dos potencias.
Séjourné se ha asegurado un puesto de peso en el nuevo equipo de la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, como uno de los seis vicepresidentes ejecutivos. Pero se mantienen las dudas sobre si en la práctica podrá ejercer la influencia necesaria para ostentar el título de «vicepresidente ejecutivo de prosperidad y estrategia industrial».
La carrera de Séjourné
Séjourné, ex eurodiputado, fue el ministro de Asuntos Exteriores más joven de la historia reciente de Francia, al ser nombrado a la edad de 38 años. En su nuevo puesto en la Comisión Europea, será el encargado de industria y el mercado único, aunque no tendrá ni voz ni voto en cuestiones digitales o de defensa.
A favor del nuevo comisario juega su estrecha relación con Macron, además de su conocimiento de las instituciones de la UE. Ursula von der Leyen destacó que conoce muy bien a Stéphane Séjourné del Parlamento Europeo y afirmó estar convencida de que será un gran comisario. En su nuevo cargo, Séjourné guiará el trabajo para crear las condiciones para que las empresas prosperen, para la inversión y la innovación, para la estabilidad económica y el comercio, y para la seguridad económica, según von der Leyen.
Críticas a Séjourné
Sin embargo, son también muchos los críticos con el futuro comisario. Por ejemplo, Céline Imart, eurodiputada francesa por el Partido Popular Europeo, expresó sus dudas tras el anuncio, señalando la inexperiencia de Séjourné y su escaso dominio del inglés, idioma dominante en Bruselas: “Se lo van a comer vivo y la influencia francesa pagará el precio”.