El Instituto Nacional de Estadística ha revelado datos sobre la evolución demográfica en España, señalando un crecimiento poblacional del 10,6% desde 2006, alcanzando los 48,69 millones de habitantes en el primer trimestre de este año. Sin embargo, este incremento no ha sido uniforme en todas las franjas de edad, siendo especialmente preocupante la disminución del grupo de niños menores de 15 años, cuyo número ha retrocedido a niveles no vistos en dieciocho años.
Descenso de niños en el país
Actualmente, el país cuenta con 6.388.397 niños de 0 a 14 años, cifra que representa un descenso desde el máximo alcanzado en 2013, cuando superaron los 7 millones. Este retroceso implica un retorno a los niveles de 2006, cuando la población infantil era apenas de 6.380.270, a pesar de que la población total era cuatro millones menor.
Caída de la natalidad
Esta tendencia refleja una proporción cada vez menor de niños menores de 15 años en relación con la población total, representando actualmente solo un 13,1%, frente al 14,5% en 2006 y el 15% en 2011. Además, dentro de este grupo, la franja de los más pequeños es la menos numerosa, debido a la significativa caída en la tasa de natalidad en los últimos años.
Un crecimiento debido a la inmigración
El crecimiento demográfico en España se debe exclusivamente a los flujos migratorios, ya que el crecimiento natural arroja un saldo negativo, con más defunciones que nacimientos. En el primer trimestre de este año, la población residente en el país aumentó en 82.000 personas, principalmente debido al aumento de residentes extranjeros, que compensó la disminución en la población autóctona.
Preocupación por la economía del futuro
La disminución en el número de niños plantea preocupaciones sobre el estrechamiento de la base de la pirámide poblacional en los próximos años. Estos niños, que en el futuro serán trabajadores, podrían no ser suficientes para sostener el crecimiento económico del país ni para compensar el aumento en el número de jubilados. Por lo tanto, es un fenómeno demográfico con importantes implicaciones económicas, y se hace necesario anticiparse a este escenario y buscar medidas compensatorias.
Diferencias entre las regiones de España
Las disparidades en la proporción de niños varían según las regiones, siendo las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta las que tienen mayor peso de niños en relación con la población total, mientras que las regiones del noroeste de la península, conocidas como la ‘España vaciada’, presentan las proporciones más bajas. El análisis por nacionalidad también revela diferencias significativas, con comunidades como la Comunidad Valenciana presentando un mayor peso relativo de niños extranjeros, especialmente en la franja de edad de 0 a 4 años.