La vicepresidenta Yolanda Díaz ha optado por apartarse del cierre de campaña en las elecciones vascas, dejando en manos de su partido, Sumar, la tarea de asegurar su presencia en el territorio . La decisión surge en medio de un panorama electoral marcado por la incertidumbre y la competencia con otras fuerzas de izquierda, como Podemos y Bildu.
De cero a dos escaños para Sumar
Sumar, la coalición liderada por Díaz, con encuestas que pronostican entre cero y dos escaños. La dificultad se agrava por la preferencia de parte del electorado de izquierda por otras opciones, como Bildu, sobre todo después de la polémica generada por las declaraciones del candidato de Bildu, Pello Otxandiano, en relación con ETA.
La postura de Sumar podría afectar su alianza prioritaria con el PSOE
El deseo de diferenciarse de otras fuerzas políticas, como el PNV, ha llevado a Sumar a adoptar una postura más independiente, lo que podría afectar su posición como socio prioritario para el PSOE. Sin embargo, la coalición sigue comprometida a luchar por los dos escaños que las encuestas le otorgan como máximo, a pesar de unas expectativas de voto que no superan el 3,6%.
Ante este panorama electoral adverso, el núcleo duro de Sumar ha decidido proteger a su líder, Yolanda Díaz, limitando su exposición en la campaña electoral. Mientras que en las elecciones gallegas Díaz tuvo una presencia más activa, en esta ocasión ha asistido solo en tres ocasiones al País Vasco para respaldar a su candidata, Alba García, y ha optado por ausentarse del mitin de cierre de campaña.
En lugar de participar en el cierre de campaña, Díaz ha asistido a una proyección de un documental sobre el escritor Benito Pérez Galdós y el cineasta Luis Buñuel en Madrid. Esta decisión podría interpretarse como un intento de proteger su imagen en caso de un posible resultado desfavorable en las elecciones vascas.