Reunión entre Orbán y Erdoğan en Budapest // Laszlo Balogh
Este viernes, con motivo del 61º cumpleaños de Viktor Orbán, primer ministro húngaro, se produjo una llamada telefónica entre él y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan. Aparte de la calurosa felicitación de Erdoğan, ambos cargos tuvieron tiempo para discutir otra serie de temáticas de interés común, incluidos los lazos bilaterales y cuestiones globales.
Erdoğan y Orbán destacaron la importancia de fortalecer las relaciones entre Turquía y Hungría, enfatizando la necesidad de una cooperación continua en varios sectores clave. Desde 2013, cuando se estableció el Consejo de Cooperación Estratégica de Alto Nivel, ambos países han trabajado para elevar sus relaciones a un nivel estratégico, logrando avances significativos en comercio, defensa y energía.
Uno de los puntos centrales de la discusión fue el apoyo de Hungría al proceso de adhesión de Turquía a la Unión Europea. Erdoğan subrayó que el respaldo de Budapest es crucial para Turquía, que ha enfrentado numerosos obstáculos en su camino hacia la membresía plena en la UE.
El proceso de adhesión ha sido largo y complicado, a pesar de haber iniciado formalmente las negociaciones en 2005, Turquía tiene una historia mucho más larga con la UE, habiendo firmado su primer acuerdo de asociación con la Comunidad Económica Europea, la predecesora de la UE, en 1963.
Aunque las negociaciones se han estancado en los últimos años debido a diferencias políticas y desacuerdos, Turquía sigue siendo un socio económico y de defensa clave para la UE. En este sentido, Erdoğan reiteró que Turquía ha cumplido con la mayoría de los criterios necesarios para la membresía y sigue comprometida con su objetivo de unirse al bloque europeo.
Ambos líderes discutieron la cooperación en el ámbito energético, reconociendo la importancia de asegurar suministros estables y diversificados. La cooperación en el sector energético es vital para ambos países, especialmente en el contexto de las recientes tensiones geopolíticas que han afectado los mercados globales de energía. Los cargos han acordado seguir trabajando juntos para desarrollar proyectos energéticos que beneficien a sus naciones y fortalezcan su seguridad energética.
La llamada también abordó temas globales y regionales, incluidos el desarrollo del Mediterráneo Oriental y la situación en Ucrania. Turquía y Hungría comparten intereses comunes en la estabilidad regional y han colaborado en diversas iniciativas para promover la paz y la seguridad en sus respectivas regiones.
Los dos mandatarios expresaron su preocupación por la situación en Ucrania y reafirmaron su apoyo a una resolución pacífica del conflicto. Turquía ha desempeñado un papel mediador en la crisis ucraniana, y Hungría, como miembro de la UE, ha participado en esfuerzos diplomáticos para buscar una solución negociada.
Erdoğan y Orbán concluyeron su conversación reafirmando su compromiso de fortalecer la alianza estratégica entre Turquía y Hungría. Ambos países seguirán colaborando estrechamente para abordar desafíos comunes y aprovechar oportunidades de desarrollo conjunto.
