El presidente de Argentina, Javier Milei, ha decidido que su primera visita oficial a un país europeo será a Francia. El 19 de junio, Milei se reunirá en París con el presidente francés, Emmanuel Macron, en un contexto marcado por la crisis diplomática con España. Esta situación se desató tras la decisión del gobierno de Pedro Sánchez de retirar a su embajadora en Buenos Aires.
Gira europea de Milei
Milei iniciará una gira europea de más de una semana a mediados de junio, comenzando con la cumbre del G-7 en Apulia, Italia, del 13 al 15 de junio. Invitado por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, Milei participará en el evento junto a otros líderes internacionales. Seguidamente, asistirá a la conferencia de paz sobre Ucrania en Basilea, Suiza, el 16 de junio, organizada por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, donde se espera la presencia de unos 80 jefes de Estado y de Gobierno, incluido Sánchez.
El mandatario argentino se reunirá con Macron en El Elíseo para discutir varios temas importantes, incluyendo las negociaciones entre la UE y Mercosur, y las candidaturas de Argentina a ingresar en la OCDE y convertirse en «socio global» de la OTAN. Esta visita oficial a Francia hace una diferencia sin precedentes en las relaciones bilaterales entre Madrid y Buenos Aires, ya que, tradicionalmente, los presidentes argentinos elegidos en democracia han elegido España como su primer destino europeo.
Tras su visita a Francia, Milei tiene previsto viajar a España el 21 de junio para recibir un galardón del Instituto Juan de Mariana por su «defensa ejemplar de las ideas de la libertad». Sin embargo, el viaje está en el aire debido a la crisis diplomática. El Gobierno de Sánchez no ha descartado impedir la entrada de Milei en territorio español, según el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
Antes de la crisis, Milei había solicitado reuniones institucionales con el Rey Felipe VI en la Zarzuela y con Sánchez en la Moncloa, marcando la visita como oficial. Ahora, el gobierno español debe decidir la postura diplomática a adoptar frente a esta solicitud.
La tensión entre Milei y el gobierno español se intensificó cuando Milei asistió al mitin de Vox en mayo, evitando reuniones con el Rey o el presidente del gobierno, una práctica poco común para cualquier dirigente internacional en su primera visita a España. A pesar de esta decisión inusual, el Gobierno de Sánchez facilitó la estancia de Milei, permitiendo que su avión aterrizara en la base militar de Torrejón y proporcionando seguridad durante su visita de 48 horas en Madrid.