El líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, tomó la palabra este miércoles en el Congreso, cerca de las siete de la tarde, para exigir la dimisión de Pedro Sánchez. La petición se basa en la reciente investigación judicial que salpica al exministro José Luis Ábalos, estrecho colaborador del presidente. Según Feijóo, la implicación de Ábalos en el caso de corrupción hace insostenible la permanencia de Sánchez en el cargo, ya que, en su opinión, “no hay cortafuegos posible” entre ambos. “Sin Ábalos, no existiría Pedro Sánchez. Está rodeado de corrupción, es el uno de la trama”, sentenció el líder del PP.
No es la primera vez que el popular pide la renuncia de Sánchez. Ya lo hizo en julio, tras las acusaciones que involucraban a la esposa del presidente. En aquel momento, el líder popular instó a Sánchez a redactar su “tercera y definitiva carta de dimisión”. Recientemente, el 13 de octubre, Cuca Gamarra, secretaria general del PP, también solicitó la salida de Sánchez en una rueda de prensa.
El PP en tensión: entre el caso Ábalos y el escándalo de Ayuso
Feijóo aprovechó la situación para atacar al Gobierno, aunque su propio partido enfrentaba un día incómodo debido a las revelaciones que afectaban a la pareja de Isabel Díaz Ayuso. Durante la sesión de control, el Ejecutivo utilizó la información recién publicada sobre el novio de la presidenta madrileña, quien habría intentado deducir gastos de unas vacaciones con Ayuso en Croacia y Grecia. La incomodidad se notaba entre los diputados del PP, quienes, al finalizar la sesión, admitían que la jornada había sido desfavorable. “Nos han golpeado por todos lados”, confesaba un parlamentario popular.
A pesar de las críticas del Gobierno, los diputados del PP evitaron defender abiertamente a Ayuso. Solo Cayetana Álvarez de Toledo salió en su defensa desde la tribuna de oradores. Esta falta de apoyo hacia la presidenta madrileña refleja el malestar dentro del PP, que ha optado por una estrategia de silencio mientras intentan desviar la atención hacia los casos de corrupción que involucran al Ejecutivo.
Feijóo respalda a Ayuso, pero enfrenta una difícil gestión interna
La postura de Ayuso también ha generado controversia. La presidenta madrileña decidió no acudir a la ronda de reuniones convocada por Sánchez en La Moncloa, desafiando así el criterio del líder del PP, quien había advertido que sería un “error” que los presidentes autonómicos no asistieran.