El Consejo de Ministros ha dado luz verde a una nueva versión de la Selectividad, que se implementará a partir de junio de 2025. Este examen dejará de llamarse EvAU para ser conocido como PAU, Prueba de Acceso a la Universidad, según propuesta del Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes.
La ministra Pilar Alegría anunció este cambio en una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, explicando que la nueva Selectividad contará con estructuras y características básicas, así como criterios de corrección comunes para todos los territorios.
Este nuevo modelo ha sido ampliamente discutido con las comunidades autónomas, universidades, órganos de rectores, estudiantes y familias, como destacó Alegría. Se han llevado a cabo más de 200 reuniones en este contexto, lo que la ministra describió como «el modelo más debatido de la historia«. Es la primera vez que se incluyen criterios comunes y homogéneos para todos los territorios en una prueba de acceso a la universidad, tanto en el formato como en la evaluación de las pruebas, subrayó Alegría.
Las faltas de ortografía reducirán la nota en un 10 por ciento en los exámenes
«Fruto de ese acuerdo y diálogo con universidades y comunidades autónomas, hemos aprobado este decreto con esa prueba que hoy ustedes conocen», confirmó. Entre las novedades de la nueva PAU, las faltas de ortografía reducirán la nota en un 10 por ciento en los exámenes, y los alumnos podrán elegir entre distintas preguntas, aunque deberán haber estudiado todo el temario. Se mantienen las preguntas tipo test.
En los ejercicios que requieran la producción de textos por parte del alumnado, la valoración correspondiente a la coherencia, cohesión, corrección gramatical, léxica y ortográfica de los textos, así como su presentación, no podrá ser inferior al 10 por ciento de la calificación de la pregunta o tarea. El decreto precisa que la aplicación de estos parámetros, que reducen un 10 por ciento la nota por faltas de ortografía y gramaticales, «podrá flexibilizarse en el caso del alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo».
La nueva prueba contará con un único modelo de ejercicio para cada materia. Los ejercicios estarán estructurados en diferentes apartados, que podrán contener una o varias preguntas o tareas. El número total de preguntas o tareas a resolver deberá adecuarse a la duración total del ejercicio, teniendo en cuenta que el alumnado necesitará dedicar un tiempo significativo tanto a la lectura y análisis de la documentación aportada como al diseño de la estrategia para la resolución de las preguntas o tareas planteadas.