El Tribunal Supremo ha desestimado la querella presentada contra el líder de Vox, Santiago Abascal, por «traición a España» con motivo de su viaje a Israel, debido a que se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu. Esta querella fue presentada por el sindicato Iustitia Europea, que consideraba que su viaje a Israel habría roto la neutralidad de España, al declarar que el Gobierno de España tiene que revertir el reconocimiento del Estado de Palestina.
El pasado 29 de mayo, el Supremo recibió una querella contra Santiago Abascal, y este mes la Sala de lo Penal ha decidido no admitir este recurso a trámite. Iustitia Europea presentó la querella contra el líder de Vox por los supuestos delitos que habría cometido al comprometer la paz o la independencia del Estado, lo cual estaría contemplado en los artículos 591 y 592.1 del Código Penal.
Ambos artículos señalan que los delitos se cometen cuando un ciudadano, “durante una guerra en que no intervenga España, ejecutare cualquier acto que comprometa la neutralidad del Estado o infringiere las disposiciones publicadas por el Gobierno para mantenerla”.
Estos delitos están castigados con penas de hasta ocho años de prisión, ya que comprometen la dignidad o los intereses vitales de España. La Fiscalía pidió a la Sala de lo Penal que asumiera la querella debido a que Abascal es miembro del Congreso de los Diputados y, por tanto, aforado. A pesar de las peticiones de la magistrada al Alto Tribunal, el Supremo ha considerado que no debe abrir causa o diligencias contra el líder de Vox.
El Supremo no ve delito en el viaje de Abascal a Israel
El auto publicado por el Supremo señala que: “Los hechos descritos por la querellante no satisfacen los elementos integrantes de los tipos por los que se formula querella. No sólo no parece que la conducta del querellado sea susceptible de quebrar o poner en riesgo la neutralidad de España en la ofensiva militar israelí en el territorio de Gaza, sino que ni siquiera se infiere del contenido de la querella que la conducta del querellado haya supuesto la creación de un peligro efectivo, real y concreto de que España entre en un conflicto del que no es parte”.
Así mismo, este auto matiza que: “Lejos de ello, en la misma queda constancia de que el querellado ha actuado como presidente del partido político Vox expresando su parecer sobre la actuación del Gobierno de Israel y sobre cuál sería su actuación en el supuesto de que llegara a gobernar”.