El productor musical de Malinche, Nacho Cano, ha vuelto a defender su inocencia frente a la denuncia interpuesta por una de sus becarias. Cano ha denunciado que ha sido víctima de una extorsión por parte de la joven que lo denunció ante la Policía Nacional. Sus abogados sostienen que la situación actual es producto de un “chantaje”.
En respuesta a las acusaciones, Nacho Cano ha presentado un escrito ante el Juzgado de Instrucción Número 19 de Madrid, donde se incluyen conversaciones de WhatsApp entre la becaria mexicana y una de las responsables la producción musical Malinche, donde la joven realizaba su beca. Estos mensajes muestran una conversación sostenida durante varios días, que se inició después de que los responsables del proyecto decidieran rescindir la beca de la denunciante.
Conversaciones remitidas al juzgado por la defensa de Nacho Cano. Fuente: Vozpopuli
La primera reacción de la becaria al enterarse de que no continuaría trabajando en la producción de Nacho Cano fue de frustración, expresada a través de mensajes como: “No quiero irme”, “no me merezco el trato que me están dando” y “tampoco merezco perder esta oportunidad tan importante”. En varias ocasiones, la joven insistió en hablar con Nacho Cano, llegando a solicitarlo hasta en cuatro ocasiones. Sin embargo, la respuesta por parte de los responsables de la producción fue entregarle un billete de vuelta a México para el día siguiente. Tras recibir esta noticia, la becaria decidió que ya no quería hablar con Nacho Cano.
Los mensajes que demuestran el chantaje a Nacho Cano
Ante la noticia de su expulsión, la becaria envió un mensaje en el que le proponía a los responsables del musical llegar a un acuerdo: “Quiero llegar a una negociación competente a todo el esfuerzo laboral y personal (no tengo a dónde llegar a vivir) qué estoy padeciendo en estos momentos por sus decisiones precipitadas, agresivas y no están respetando los acuerdos de la primera carta invitación que R. nos hizo llegar”.
La becaria de Nacho Cano planteó dos puntos clave en su negociación para aceptar un acuerdo. El primero consistía en que la productora de Nacho Cano debía realizar una transferencia de 5.350 euros a la cuenta de su madre en México. El segundo requerimiento era que le entregaran una carta de recomendación firmada por el propio Nacho Cano.
Algunos de los mensajes presentados por los abogados de Nacho Cano evidencian lo que consideran un chantaje hacia el productor musical. En uno de los textos, la becaria expresó: “Mi abogado dice que esta petición les saldrá mucho más barato que un juicio, aparte de manchar su imagen y con la posibilidad de que pudieran regresar a todos los becados si yo procedo”.
En otro mensaje, la joven confirma su intención de no volver a México: “Yo durante los meses de diciembre y febrero iba a generar estos 6.000 euros, es la temporada más fuerte, no quiero regresar a México porque por lo menos esos ingresos ya no podré recuperarlos allá”.